El Heliconacter pylori, una especie bacteriana que puede sobrevivir dentro de los órganos digestivos, es un factor de riesgo sustancial para el desarrollo del cáncer de estómago (gástrico). El mecanismo mediante el cual esta bacteria causa la enfermedad no se conoce con claridad. Una investigación nueva realizada por expertos suizos y alemanes revela que la infección del revestimiento interior de los órganos digestivos ocasiona daños en las células de dichos tejidos. La bacteria no se encuentra en el interior de las células, pues permanecen adheridas a las superficies, lo cual es suficiente para provocar rupturas en las hedras del ADN, destrozando el hélice doble del ADN. Los investigadores demostraron que la mayoría de los daños se reparan, no obstante, al largo plazo, el sistema de reparación se agota y los defectos se acumulan. Los resultados apuntan a un mecanismo importante empleado por algunas bacterias para causar cambios que conllevan al cáncer en los humanos.
Referencia