Durante el desarrollo, el tracto intestinal necesita crecer asimétricamente. Si no puede, un bebé nace con un defecto de nacimiento intestinal. Mientras estudiaban este fenómeno, los investigadores de la Universidad Estatal de Carolina del Norte descubrieron el compuesto heterotaxina, que no solo causa defectos de nacimiento intestinales; también puede inhibir el desarrollo del cáncer. La naturaleza inductora de defectos congénitos (teratogénica) de la heteroaxina es el resultado de sus efectos negativos sobre el desarrollo. El compuesto también aumenta la adhesión celular (y por lo tanto la migración celular) e inhibe la formación normal de vasos sanguíneos, la melanogénesis y la transición epitelial-mesenquimal, todos los cuales son pasos clave en el desarrollo del cáncer.
Se deben realizar más investigaciones sobre la heterotaxina antes de que pueda usarse como fármaco. Este hallazgo recuerda el descubrimiento de que la talidomida, el infame fármaco que causó numerosos defectos de nacimiento en Inglaterra, podría usarse para detener el proceso de angiogénesis y así limitar el crecimiento tumoral.