En un estudio publicado en Cancer Research, poner a los ratones en una dieta baja en carbohidratos / alta en proteínas redujo el riesgo de cáncer y ralentizó el crecimiento de los tumores implantados. En un experimento, a varias cepas diferentes de ratones se les implantaron tumores humanos o de ratón y se alimentaron con una de las dos dietas (cada una con énfasis en proteínas o carbohidratos) durante un período de dos años. Los resultados mostraron una disminución constante en la tasa de crecimiento tumoral para ratones con una dieta alta en proteínas.
Cuando los investigadores probaron las diferentes dietas en ratones que habían sido modificados genéticamente para desarrollar cáncer de mama, encontraron que los ratones con la dieta alta en proteínas no desarrollaron la enfermedad. Los investigadores creen que es probable que los hallazgos se apliquen a los humanos.