Se utilizó un análisis de los hábitos alimenticios de más de 33.000 mujeres para estimar el impacto de la ingesta dietética de acrilamida sobre el riesgo de cáncer de mama. La acrilamida se encuentra en alimentos ricos en carbohidratos cocinados a altas temperaturas (es decir, papas fritas y papas fritas). También se encuentra en el humo del cigarrillo. Los resultados indican que para esta población, la ingesta de acrilamida no se asoció con el riesgo de cáncer de mama en mujeres posmenopáusicas. Se observó una asociación entre un mayor consumo de acilamida y el riesgo de cáncer de mama en mujeres premenopáusicas, pero el vínculo no fue fuerte y debe investigarse más a fondo.
Referencia