La proteína STING, del inglés Stimulator of Interferon Genes, está involucrada en la respuesta immune contra virus y cánceres. Debido a esto, los científicos están interesados en aprovechar STING para tratamiento de cáncer. Sin embargo, los químicos que activan la proteína STING a menudo son inestables, lo que dificulta el uso de esta para tratar el cáncer.
Los científicos del Centro de Investigación Scripps han creado varias sustancias químicas que pueden activar STING. La mejor hasta ahora se llama SR-717. Los científicos planean utilizar este hallazgo para crear medicamentos que aumenten la actividad de STING. Este trabajo podría tener un impacto significativo en el tratamiento del cáncer y otras enfermedades.