Investigadores japoneses han confirmado que los perros pueden detectar con mucha precisión el cáncer de colon, incluso en etapas tempranas. Los investigadores dejaron que los perros olfatearan muestras de heces o aliento de pacientes con cáncer, pacientes normales e individuos con afecciones no cancerosas del colon (es decir, diverticulitis y colitis). Los perros fueron sorprendentemente precisos y predijeron la presencia de cáncer de colon sin confundirse con otros trastornos o personas que fuman.
Si bien es poco probable que los perros comiencen a examinar a los pacientes, su capacidad indica que la presencia de cáncer, incluso el cáncer en etapa temprana, conduce a la producción de sustancias químicas que pueden detectarse. El siguiente paso es desarrollar un detector mecánico que sea tan preciso como un perro.