Un estudio de más de 90.000 muertes en Nueva Zelanda ha encontrado un vínculo entre crecer/trabajar alrededor del ganado y el desarrollo de cánceres de sangre. El vínculo fue más fuerte entre aquellos que crecieron cerca de las aves de corral. En esta población, el riesgo fue tres veces mayor. Se desconoce la causa, pero puede estar relacionada con la exposición a determinados tipos de virus.